A las Hermanas Pobres de Santa Clara de esta circunscripción Sus sedes
«Habiéndonos, pues, llamado el Señor a cosas tan grandes, de modo que en nosotras puedan mirarse como en un espejo aquellas que son ejemplo y espejo para los demás, estamos muy obligadas a bendecir y alabar a Dios, y a afianzarnos más y más en el Señor para hacer el bien» (Test Cl 21-22)
Queridas hermanas que continuáis el proyecto de vida iniciado por Santa Clara: El Señor os dé la Paz.